Consejos para que tu bebé pueda disfrutar de un verano fresquito

Debes tener en cuenta que en verano tu bebé también sufre las olas de calor. La Asociación Española de Pediatría (AEPED) informa que no hay que exponer directamente al sol a los bebés menores de seis meses. En las actividades de exterior, el recién nacido debe estar a la sombra, hidratado y con la protección solar adecuada, para
evitar riesgos como la insolación, la deshidratación o los golpes de calor.

Es importante que el recién nacido vista ropa transpirable hecha de tejidos naturales, como el algodón. Los días de muchísimo calor es mejor dejarle solo con el pañal.

Si quieres viajar con el pequeño en coche, es recomendable elegir las primeras o últimas horas del día e instalar parasoles en las ventanillas de atrás.

En verano evita el portabebés y opta por el cochecito de bebé o la silla de paseo. La habitación debe estar entre 21 y 23 grados y arropa al pequeño con una sábana de algodón. Mejor el ventilador que el aire acondicionado, porque el aire artificial reseca las mucosas y puede producir enfriamientos.

En verano debes tener cuidado con la deshidratación, por lo que el bebé necesita más tomas aunque de menos cantidad. El biberón debe estar templado o a temperatura ambiente, pero nunca frío.

Para dar el pecho busca un sitio fresco y tranquilo, sin corrientes de aire procedentes de ventiladores o aires acondicionados. Las mamás deben tomar más líquidos en verano, para mantener la producción de leche materna.

Protege a tu bebé de las picaduras de mosquitos y otros insectos. Para ello, evita dejar las ventanas abiertas con la luz encendida y coloca mosquiteras en las ventanas.

¿Cómo evitar la dermatitis del pañal?

En verano es muy habitual la dermatitis del pañal. Se trata de una lesión cutánea por el pañal. Aparece un enrojecimiento en la piel del bebé. Te explicamos una serie de recomendaciones para evitar esta afección:

Cambia los pañales con regularidad

Es muy importante que las necesidades del pequeño no permanezcan mucho tiempo en contacto con su piel. Te recomendamos que salgas a la calle con una bolsa preparada con pañales, agua, toallitas, etc. Antes de colocar el siguiente pañal es esencial secar la piel.

Deja al bebé sin pañal durante una hora

Deja al pequeño sin pañal durante periodos cortos, para que la piel se mantenga seca.

Utiliza toallitas sin perfume

Limpia la zona con toallitas sin perfume y sin alcohol. El exceso de ingredientes y fragancias pueden afectar la barrera de la piel del bebé.

Crema protectora

Para proteger la piel y aliviar la irritación, opta por una crema protectora como las pastas de agua con óxido de zinc. La mejor opción son los productos naturales sin parabenos.

¿Con qué frecuencia hay que bañarle?

En verano es muy importante refrescar al recién nacido con el baño diario y utilizar cremas hidratantes ligeras. No te agobies si el bebé llora mucho con los baños, poco a poco se irá acostumbrando al agua.

Durante el primer mes, evita el jabón, ya que con el agua es suficiente. Tampoco es necesario el champú ni el acondicionador, pero lava al pequeño con agua tibia, porque le relaja.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda postergar el primer baño del bebé hasta 48 horas después del nacimiento. Es muy importante secar todas las zonas, así que cuidado con los pliegues de la piel.

¿Cómo saber si el bebé le da un golpe de calor?

Paula Vázquez, presidenta de la Sociedad Española de Urgencias de Pediatría, explica unos consejos para evitar los golpes de calor en bebés: “No hay que exponerles al sol y conviene refrescarles con baños o ventilador, ponerles ropa ligera, gorra y mantenerles en la sombra”.

Cuando los bebés sufren un golpe de calor, los síntomas son: fiebre alta, vómitos, mareos, piel seca y muy caliente. Si tu bebe tiene estos síntomas es muy importante acudir, lo antes posible, a urgencias para que el niño sea hidratado y atendido.

No te agobies y pide ayuda

Un bebé recién nacido te necesita las 24 horas del día para comer, dormir, pasear, cambiarle los pañales, jugar, etc. Es normal que al principio los padres estén cansados con el cuidado del recién nacido, el trabajo, los trámites del nacimiento, las tareas domésticas…

Los profesionales de BBTramit, como graduados sociales expertos en el tema, aconsejan que los progenitores no se preocupen por las tareas administrativas, ya que la mejor opción es que pidan ayuda a los expertos para disfrutar de los primeros días de vida del recién nacido.

Gracias a los profesionales los padres pueden centrarse en el cuidado del pequeño y dar prioridad a otras cuestiones.

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