Para los que somos aficionados al sillonball, sabemos que no hay nada que nos pueda hacer levantarnos de nuestro sitio. Ni un día de piscina, ni una salida al monte, ni el tomar vermut con los amigos del instituto, sentimos una atracción hacia nuestro sillón que hace que solo queramos estar allí disfrutando de nuestro salón, con el mando a distancia al lado y la programación de televisión. Ahora bien, os voy a decir algo con lo que no podrás hacer frente: una plaga. Os lo digo por experiencia que si te visita una plaga, nada podrás hacer. Te tocará levantarte de tu sillón y en el peor de los casos, incluso tener que abandonar tu domicilio.